¿Por qué invertir en una Planta Estática de Alimentación para tu ganado?
Os presentamos los principales motivos por los cuales invertir en una planta estática automatizada para sus instalaciones ganaderas es una de las mejores inversiones a medio-largo plazo.
Tatoma es una empresa que desde 1983 está comprometida en la concepción, el diseño, la fabricación y la puesta en marcha de sistemas de alimentación para ganado rumiante. Una prueba de ello es que dispone de todos los tipos de tecnología de sinfines y soluciones tanto para pequeños ganaderos como para aquellos que han convertido sus granjas en fábricas de leche.
Con base en su experiencia y tecnología y para ganaderías de 1500 vacas en adelante, propone la implementación de plantas estáticas totalmente automatizadas que, junto con los mezcladores autopropulsados de gran capacidad, son capaces de producir una tonelada distribuida en el comedero a un coste de entre cuatro y cinco euros por tonelada, respectivamente.
Plantas estáticas: automatización y ahorro
Fue en 1987 cuando Tatoma comenzó la concepción y diseño de plantas estacionarias, implementando la experiencia y el conocimiento acumulado en el sector de los mezcladores. Es así como, en 1993, fabrican la primera planta de mezclas totalmente automatizada para la Cooperativa Pirenaica de la Seo de Urgel (Lérida), empresa que desde entonces produce 5000 raciones diarias para vacas de producción en solo cinco horas de trabajo, resultados alcanzados al combinar la disposición de los silos y los ingredientes en un área próxima al mezclador con una serie de alimentadores que descargan sobre una cinta pesadora, donde se preparan los ingredientes de la ración que se introducirán en el mezclador. Gracias a la automatización se solapan los ciclos de carga, mezcla y descarga, generándose ahorros importantes de tiempo respecto a los mezcladores arrastrados y autopropulsados, dado que duplica su capacidad de producción. Además, permite mejorar la gestión del negocio al disponer de registros de las cantidades de ingredientes y del producto final. Es decir, la automatización se traduce para el cliente en ahorro y efectividad.
En la actualidad disponen de 100 plantas de funcionamiento, de las cuales 25 funcionan de forma totalmente automatizada, y 13 específicamente destinadas a la producción de mezclas para vacas.
Inversión, ampliación y mejoras de la producción
Como broche de oro a todo el esfuerzo en investigación y desarrollo realizado en casi 30 años de trayectoria, la empresa cuenta con la planta de mezclas de la empresa Ambar Feed Mills, la mayor y más avanzada fábrica de piensos de Israel, perteneciente a la Granot Central Cooperative Ltd. Con una producción anual cercana al millón de toneladas de comida compuesta para animales, hoy es una de las mayores cooperativas del mundo.
Así, en 2010 se firmó un contrato para la construcción de una planta estática capaz de producir 5000 raciones diarias para vacas de leche, constituida por un mezclador horizontal, una cinta pesadora, dos alimentadores de cadena y un alimentador de sinfín, entre otros equipos trabajando de forma completamente automatizada. En lo sucesivo, se verificaron ahorros de hasta un 7% en materias primas, en virtud de una mayor exactitud en las cargas y a la reducción de los desperdicios, así como sustanciales mejoras en la homogeneidad y estabilidad de la ración.
Con semejantes resultados, en 2011 se realizó una segunda ampliación que consistió en la incorporación de tres nuevos alimentadores al sistema original. Finalmente, y para satisfacer la creciente demanda, se completó una última ampliación para alcanzar las 10.000 raciones diarias con el empleo de un nuevo mezclador y un sistema de cintas auxiliares en paralelo con el ya existente, mejorando así la respuesta ante eventuales averías de alguno de los sistemas. Generalmente, el tiempo total de ciclo de una mezcla se sitúa entre 10 y 15 minutos en función de la composición y de las cantidades de la ración. Tras la ampliación, lograron pasar de 45 a 75 toneladas por hora.
Ahora, a casi dos años de la última ampliación, se han detectado una serie de mejoras no observables en un principio. Estas son:
- Reducción de los porcentajes de merma y desperdicio de ingredientes del 2 al 0,2% en granos y concentrados, del 5 al 1% en henos y del 7 al 3,4% en ensilados.
- Reducción de la mano de obra en el proceso de carga, mezcla y distribución, y ahorros muy importantes en los costes de mantenimiento y medio y largo plazo.
- Exactitud en la composición de la ración, de tal forma que lo que come el animal coincide con lo programado por el nutricionista.
- Homogeneidad y estabilidad en la producción de leche, con incidencia directa en el aumento de la producción y en la reducción drástica del porcentaje de problemas metabólicos.
Previsiblemente, esta suma de mejoras se tradujo en el incremento de las ganancias de la empresa, las cuales se estima han alcanzado un apreciable 45% en un intervalo de 24 meses.
De tal manera, las plantas estáticas automatizadas, junto con los modelos autopropulsados de gran capacidad, hoy se erigen como la mejor opción de inversión para la alimentación de tu ganado.